REFLEXION, HABILIDAD, FLEXIBILIDAD.

“Pitágoras percibía la armonía universal y sostuvo que, con solo quererlo, el ser humano puede intensificar y prolongar su experiencia de vida.”

Toda persona posee los recursos internos necesarios para alcanzar lo que quiere y debe desarrollar la habilidad para utilizar esos recursos internos.
Cuando se ha logrado reflexionar sobre la forma de pensar y de concretar sus objetivos, se verá reflejado en el entorno, en el ambiente laboral y en otros aspectos de su vida entonces, habrá iniciado el proceso de cambio que le permitirá ampliar su campo de posibilidades.
Los cambios implican un desafío, tienen un costo, implica un proceso y dentro de ese proceso deben existir tres fases principales a recorrer:
Ø Fijar metas.
Ø Crear estructuras, tener nuevas actitudes y aceptar nuevas formas de trabajo.
Ø Un proceso de cambio para llegar al éxito debe desarrollarse consciente y responsablemente.
Frente a este trabajo sobre sí generalmente surgen los acechos internos: miedos, dudas, temores, ansiedad, preocupaciones y otras emociones pero seguro es que, con responsabilidad, aceptación, confianza, flexibilidad, motivación y decisión, van a ir desapareciendo a medida que se cumplan los designios.
Solo queda plantearse:
Ø Me decido a dar los pasos necesarios para concretar esos cambios?
Ø Es el momento adecuado para efectuar esos cambios?
Ø Como está mi potencial energético?
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